Título: The promised Neverland
Autor/a/es: Kaiu Shirai y Posuka Demizu
Nº de tomo: 18
Opinión(posibles spoilers de este volumen y de anteriores):
En este decimoctavo tomo de The Promised Neverland, Emma y Ray logran reencontrarse con Norman en el interior del castillo de la familia real en el que ya no queda ningún demonio en pie. Norman les dice a sus amigos que ya no pueden frenar su plan de extinción demoníaca aunque quisieran, pero Emma le convence de que juntos pueden lograrlo y su amigo le confiesa que, al igual que el resto de niños de la granja Lambda tiene poco tiempo de vida debido a los experimentos. Entonces recuerdan a Adam, quien no ha sufrido convulsiones en ningún momento, y eso les da esperanzas.
Justo cuando todo parece ir bien, resucita la reina con su doble núcleo y se convierte en un monstruo que devora todo a su paso, incluyendo los cadáveres. Cuando todo parece estar peor, llegan Miyuka y Sonyu al rescate, quien resulta ser el hermano de la reina. Los demonios luchan valientemente y todo parece perdido, pero la reina se derrumba ya que sus células no pueden soportar y muere destruida por su propia ambición. Miyuka y Sonyu le dicen a los niños que se encargarán de estabilizar el reino y Emma y los demás vuelven a la guardia, pero sus amigos ya no están: han sido secuestrados por Peter Ratri y un ejercito de demonios.
Se nota que estamos al final, ya sólo quedan 2 tomos más, y las tramas se van cerrando. Quizás habría podido pasar sin la necesidad de resucitar de nuevo a la reina, en un cliché del shonen, pero se lo perdono después de tantos tomos buenos.
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