Año publicación: 2019
Autor/a: José María Bravo Lineros
Número de páginas: 670
Argumento:
Últer, año 194 después del Azote:
La ciudad de Mur’ubi es ahora el enclave estratégico que condiciona el dominio marítimo del mundo conocido. Cuando un brutal asesinato conduce a la casa Mur Asyb a retomar una antigua lid de sangre, cuatro hombres se internarán en las sombras para enfrentase a sus propios fantasmas: Naúd, joven asesino del culto a la diosa Mahyarat, se estremecerá al descubrir un pasado que contradice cuanto cree saber; Zaiel Mevnorás, veterano de la Armada devenido en senescal, sentirá sobre los hombros el peso de responsabilidades que jamás pensó en acometer; Nezaj, patriarca de los Mur Asyb, luchará por mantener el ascendiente de su linaje sumido en la rabia y el rencor; y es justo allí, en las sombras, donde vive Faruh, un viejo soldado preso de una promesa al que sus ojos ciegos han condenado a medrar en las calles.
En Mur’ubi, la política y la guerra son las dos caras de la misma moneda. Sombras y ceniza narra los hechos que engendra tal arbitrariedad. Si el poder, el secreto y la traición son la causa, el acero, el fuego y la sangre son la inevitable consecuencia
Opinión personal:
A veces, descubres las novelas porque conoces el autor o la sinopsis te llama poderosamente. En este caso, fue una recomendación de otro autor que me gusta bastante: Andrés Díaz Sánchez.
Afrontar una novela de casi 700 páginas a veces se hace cuesta arriba, mantener el interés del lector durante tanto tiempo sin perderlo tiene mucho mérito, y aquí Bravo lo consiguió conmigo. Nos encontramos una historia de fantasía, ambientada en un mundo diferente pero parecido al nuestro, que podría equivaler a un país mediterráneo ficticio con toques árabes del siglo XVI aproximadamente. Añadir en este sentido que la magia, si la hay, es un componente prácticamente inexistente en Sombra y cenizas, y nos encontramos ante una novela histórica pero con países inventados(si lo preferís así) en la que el género negro, las puñaladas políticas y literales están a la orden del día y vemos la acción desde varios personajes principales. Así, seguimos a un joven asesino cuyo pasado puede estar relacionado con una conspiración, un senescal(que aquí es el equivalente del comandante de la guardia ciudadana, por así decirlo) que intenta ejercer la justicia pero está atado por los nobles, un viejo noble que quiere que todo siga como era mientras quiere vengarse de una familia rival y un ciego y tullido que sólo quiere lo mejor para su sobrino, un tanto simple. Las historias se interconectan mientras conocemos mejor el mundo creado, y aunque al principio algunas palabras nos resultan extrañas, añade un toque de exotismo y diversión a la historia.
El mundo está muy bien construido, hay sangre y dolor, quizás recordando a esa fantasía más "dolorosa" como la que escribe Joe Abercrombie. Los espadazos duelen así como los personajes no son ni unos santos ni unos demonios (aunque creo que Zaiel lo hace lo mejor que puede) y consiguió mantenerme preso de la lectura.
Una buena novela, que por momentos me ha recordado al estilo de escritura y ambientación de Javier Negrete y un poco también a Malaz pero con un estilo más directo. Si os atrae la premisa dadle un tiento, calidad a raudales.
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