Autor: Alberto Vázquez Figueroa
Número de páginas: 240
Argumento:
"¿Negra?- se asombró Cienfuegos, incapaz de aceptar lo que acababa de oír. ¡Pretendes hacerme creer que eres una mujer y además negra?" Pero, naturalmente, el canario se pone objeciones: "Cada cual escoge el color de piel que más le gusta- sentencia -. Y el tuyo es más sufrido; se ensucia menos"... En el indómito nuevo Mundo ambos se enfrentarán a peripecias y peligros extremos, así como a una relación muy peculiar.
Opinión personal:
En la tercera entrega de las aventuras de Cienfuegos, lo encontramos rescatado por un barco portugués dirigido por un obeso y cruel capitán con un enorme testículo(en serio, no es broma) y haciendo amistad con una joven negra a la que llaman Azabache.
Como en las anteriores partes, la acción no descansa y enseguida cogemos cariño a la impetuosa Azabache así como odio al capitán Eu. Pero las aventuras para Cienfuegos no acabarán allí, conocerán a una extraña tribu por la que Azabache deberá pasar pruebas extrañas, a su orgulloso líder, conocer al Gran Blanco e incluso una vieja bruja que esclavizará al joven gomero.
Por otro lado, las desventuras de Ingrid seguirán en La Española cuidando del hijo de Cienfuegos y el capitán Ojeda se volverá cada vez más importante, despertando envidias y revueltas.
Como siempre, una lectura muy amena y didáctica, mostrandonos el lado oscuro (pero también el bueno y real) de la conquista así como porque se llama realmente América el continente y con que facilidad se apropia la gente de los éxitos ajenos. Una novela deliciosa, que como único punto negativo, acaba demasiado abruptamente para mi gusto pero enseguida leeré la cuarta parte.
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