Título: El alba subterránea
Autor/a/es: Sergio Requejo
Año publicación: 2021
Número de páginas: 376
Argumento:
Bajo el pueblo minero de Triviana se esconde un secreto que ha marcado su destino durante décadas. Sus habitantes han tenido que pagar un alto precio por explotar la mina de carbón, única fuente de ingresos de la comarca.
Bárbara Alfaro se ve obligada a regresar a Villa Hulla, una vivienda que su padre protegió en vida y que todos sus vecinos codician. Con su regreso, Bárbara deberá enfrentarse a su pasado y defender la casa que la vio nacer.
Tres momentos marcarán el destino de Triviana y de sus vecinos.
Tres explosiones desatarán la furia contenida bajo tierra.
El futuro tiene tres puertas, la cuestión es decidir cuál de ellas atravesar.
Opinión :
Segunda novela que leo de Sergio Requejo tras la inquietante Una casa sin reflejos. Tras un angustioso prólogo en una accidentada mina, venimos al presente en donde conocemos a Bárbara, una mujer indecisa hasta el paroxismo y traumatizada por el accidente que acabó con casi toda su familia.
El alba subterránea es una novela de ritmo pausado, a veces demasiado para mi gusto, en el que el terror proviene de las malas decisiones, de las rotas relaciones paterno filiales y del poder de las decisiones (o de no tomarlas). El entorno de un pueblo hermético que sigue tradiciones ancestrales (entroncando, pero sin llegar, con el folk horror) , los secretos ocultos, los orígenes de los personajes y las rencillas mezquinas entremezclan pasado y presente. También tiene una parte sobrenatural, o quizás podríamos darle una explicación científica, según nos apetezca más, con visiones de futuros o pasados posibles en los que siempre es más bonito y cómodo vivir.
A ratos asfixiante por las decisiones e indecisiones de los personajes en las que los adultos necesitan una colleja o dos y solo confías en que los más jóvenes no hereden sus pecados. Buena novela, que, aunque como he dicho antes, a ratos era un poco lenta, eso no le resta interés y suma enteros en su trepidante final.
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