Título: Bola de Drac Super
Autor/a/es: Toyotaro(idea original Akira Toriyama)
Nº de tomo: 10
Opinión(posibles spoilers de este volumen y de anteriores):
En este décimo tomo de BdS ya estamos enfrascados en plena saga de Moro y tanto Vegeta como Goku descubren a las malas en su pelea en el planeta Namek que el demonio puede absorber tanto la energía del planeta como la suya propia. Moro los deja medio muertos tras absorberles la energía y se dedica a buscar las bolas de dragón junto a su secuaz Cranberry mientras los saiyans se recuperan. Goku y Vegeta despiertan tres días después, pero Moro y Cranberry han localizado seis bolas y la última se encuentra justo en el poblado en el que se encuentran ellos sanando las heridas.
En esta parte del manga hay dos cosas que me han gustado mucho: por un lado ver como los namekianos recuperan la asimilación para crear un supernamekiano que luche contra Moro(como Dios con Cor Petit y Cor Petit con Neil), lástima que muera de un sólo golpe, me habría gustado verles hacer un mejor papel; por otro lado, los remordimientos de Vegeta al preguntar al jefe del pueblo si todavía le odian por haber matado tantos namekianos cuando fue al viejo Namek hace años y luego su cara de rabia y tristeza cuando descubre los namekianos asesinados por Cranberry. Cuando peor parece que lo tienen, llega Bu, avisado por Jaco y Merus (quien ya demuestra que es bastante fuerte) y apaliza a Moro de mala manera, demostrando que el monstruo Bu sigue siendo un tipo extremadamente fuerte y se podría decir que más fuerte que Goku y Vegeta (también es verdad que cuando Vegeta luchó contra Moro le había ido absorbiendo la energía así que tampoco es cuantificable), el problema es que Cranberry invoca a Polunga con la séptima bola de dragón y Moro llega allí, mata a su "compañero", recupera el poder demoníaco y pide un tercer deseo(que los lectores no conocemos todavía) para esconderse. Justo entonces, el gran Kaio Shin que derrotó a Moro en su momento (el que dio el aspecto de "gordito" a Bu) se intercambia con Bu y se prepara para luchar contra él junto a nuestros saiyans favoritos.
Un tomo básicamente de ostias, que en sí, por el momento, tampoco ha creado un villano especialmente distinto a los anteriores vistos en BdD(el poder de absorción es común, aunque es cierto que lo de robar energía a cuerpos celestes le da un powerup difícil de contrarrestar), pero la narrativa es muy amena, el punto del corazoncito de Vegeta es lo mejor y ver a un secundario como Bu lucirse de nuevo me pinta una sonrisa. ¡Que siga así!
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