Año publicación: 2018
Autor: Daryl Gregory
Número de páginas: 164
Argumento:
El grupo de terapia de la doctora Jan Sayer es algo peculiar: Stan es un anciano mutilado por unos caníbales, Harrison un cazador de monstruos retirado, Barbara fue víctima de un asesino en serie, Martin ve seres "que no deberían existir" con sus gafas y Greta es un enigma. Todos ellos forman parte de un grupo de terapia sobrenatural
Opinión personal:
Estamos todos de puta madre fue la novela que regaló la librería Gigamesh de Barcelona al hacer cualquier compra en su tienda el día de Sant Jordi. Fue la ganadora del prestigioso premio Shirley Jackson en 2014 y es una lectura ágil y bastante entretenida.
El 90% de la novela son las conversaciones de ese particular grupo de terapia de supervivientes, todos ellos parodiando pero con amor los tópicos del terror y la fantasía. El libro tiene una historia "seria" pero está escrita con toques socarrones que le dan ligereza a la trama de fondo, que la tiene.
Quizás si hubiera estado escrita de otra forma habríamos conocido más del siniestro Ebaborista o haber participado más de las secuencias de acción en lugar de que nos las cuenten a toro pasado. Por otro lado, habríamos perdido ese humor que funciona tan bien.
No es una novela que recomiende a ciegas, si bien me ha hecho pasar buenos ratos pero me da la sensación de que nos ha enseñado una ventanita de un mundo interesante pero la ha cerrado antes de que supiéramos demasiado. Al final tiene un giro interesante pero tampoco me ha impactado, no porque me lo esperar, si no porque me interesaban más otras partes de la trama.
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