Año publicación:
Autor:Norio Nanjo
Número de páginas:456
Argumento:
Vigésimo primer día del noveno mes del decimoprimer año de la era Kan’ei (21 de septiembre de 1634). Amanece en el castillo de Suruga, una atmósfera desoladora lo envuelve todo, la tensión se palpa en el ambiente. Hasta este lugar han llegado para batirse en duelo los más grandes maestros de artes marciales de todo el país.
A la hora de la serpiente, ante la presencia de Tadanaga, el gran consejero de la provincia de Suruga, dará comienzo el torneo que está llamado a convertirse en el más importante de la historia de Japón. En él se celebrarán once combates en los que los participantes lucharán a muerte con espadas auténticas, algo muy poco frecuente en época de paz.
Cuando comience la lucha, los maestros se lanzarán a un abismo de destrucción que provocará ríos de sangre y será recordado durante siglos. A medianoche, cuando todo haya terminado, la fortaleza quedará vacía y en silencio, tan solo habitada por los fatigados espíritus de los luchadores caídos.
Opinión personal:
Primera novela japonesa que leo en mi vida, después de más de 10 años coleccionando manga. Y precisamente esta novela me llamó la atención porque compartía título con un manga de Ivrea(que no he leído): Shigurui. Dicho manga es una adaptación de la novela, que a su vez es una novelización de un torneo real que sucedió en 1634 pero del que no se conservan apenas datos.
En la novela dice que es un torneo, pero en realidad lo que asistimos es a 11 duelos a muerte distintos (y los ganadores no se enfrentan entre sí para ir avanzando) que en la practica convierten la novela en casi una antología de relatos unidos por un nexo común. Cada duelo tiene su propia historia personal y Nanjo nos lleva a través de flashbacks al porqué de las rencillas y el origen del duelo: honor, amor, resentimiento.
Hay duelos para todos los gustos y el autor tira de clásicos tanto del manga como de las películas de samurais como el samurai ciego, el mango, el guerrero viejo que lucha por el honor de su familia, la mujer vengativa, el vagabundo(que encima tiene estilo de la rana), el sádico que disfruta siendo herido por personas hermosas...
Una lectura muy amena, que consigue no repetirse gracias a la variedad de personajes y duelos y que tiene un gran componente honorable pero también trágico de aquellos tiempos. Lo que peor he llevado como lector, no solo es la gran cantidad de japoneses(y eso que después de tanto manga debería estar más acostumbrado) sino las tensiones políticas soterradas que a veces hacían que me perdiera.
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