Autor/es: Douglas Preston/Lincoln Child
Argumento:
Incluso para un agente del FBI como Aloysious Pendergast esta misión no deja de entrañar grandes interrogantes: ¿cómo reconocer y recuperar una reliquia tibetana robada que nadie ha visto jamás? ¿Qué ladrón es capaz de robar un objeto cuya existencia nadie conoce y que, quizá nunca podrá dar a conocer? Las advertencias de aquel tesoro prohibido no invitan a mantener la calma: 'Ruedas de oscuridad hará girar... quien el Agoyzen ose destapar'
Opinión:
Octava(ya llevamos unas cuantas) entrega de las andanzas del detective Pendergast. En este caso, nos encontramos con la novela más mística hasta la fecha y en la que más me cuesta creerme la explicación fantástica. Casi es mejor abrazar cierto toque sobrenatural(como la gran saga de Charlie Parker) que no esa explicación extraña y algo abierta.
En todo caso, aquí cambiamos de escenario ya que casi toda la novela se desarrolla en un barco y solo tenemos como habituales a Pendergast y Constance. Es casi un asesinato en el Orient Express aunque aquí hay muchas más bajas y tenemos, de nuevo, la pura maldad como enemigo. Reconozco que hubo varios giros inesperados y pudimos ver al Pendergast más oscuro pero a la trama le faltaba el carisma de otras entregas.
Una lectura entretenida y poco más. Me gusta ver a Pendergast fuera de su ambiente habitual (Nueva York y el museo) pero el caso no tenía la suficiente fuerza para mi.
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