Año publicación: 1970
Autor: Jack Vance
Número de páginas: 215
Argumento:
Regresar a la Tierra desde el planeta Tschai implicaba solamente construir una nave… o robarla, puesto que Tschai estaba poblado por cuatro razas inteligentes nacidas entre las estrellas y, como tales, disponían de espaciodromos. Pero el problema no se presentaba tan fácil para Adam Reith. Ya había sido bastante afortunado escapando de los Chasch y de los Wankh, y de una docena de tipos distintos de humanos. Ahora, su periplo lo conducía directamente hacia los Grandes Espaciopuertos de Silvishe, en los dominios de los Dirdir. Pero los Dirdir eran completamente distintos de los otros alienígenas que competían por aquel mundo. Eran rápidos, más siniestros, y sentían una insaciable sed de caza hacia las víctimas como Adam Reith. Cuanto más se acercaba a su objetivo, más feroces se volvían sus instintos predadores…
Opinión personal:
Al fin conocemos más en profundidad a la tercera raza dominante de Tschai: Los Dirdir. Cazadores bestiales y despiadados tiene su propio código de honor pero carecen de misericordia frente a los humanos y sus enemigos.
En esta novela, Reith y sus amigos prosiguen con su incansable viaje para poder construir una nave espacial que llegue hasta la Tierra pero en territorio Dirdir serán marcados. Primero viajarán a Los Carabas, una especie de Las Vegas espacial pero mucho más brutal en donde se harán enemigos muy poderosos y luego se aliarán a su pesar con un falso hombre Dirdir llamado Wourider que intentará sacarles todo el dinero y les traicionará a la que pueda.
Vance ha sabido crear enemigos muy buenos para Reith pero el pomposo Wourider es sin duda el peor, su explotación monetaria así como sus constantes intrigas y su tremenda crueldad le harán un enemigo odioso.
Un libro muy entretenido, que se lee como el agua y que termina abierto para ver si en el siguiente logra Reith volver a casa. Pero algo me dice que los pnume no se lo pondrán nada fácil...
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